Teléfono nuevo.

Me compré un nuevo teléfono. O sea, el mismo número, pero distinta máquina.

Y saca estas fotos:


Perdonen la cara, es lo que hay.

Último paseo a la playa

Dejo unas fotos de mi último paseo por la playa. Dentro de todas las cosas que estoy haciendo, lo necesitaba.

Acá estamos en el Canelo, para variar me quemé. La Fran, en cambio, es inmune.



He aquí una tremenda polila o mariposa, no sé que era, pero tenía como un ojo en las alas. Algo le pasaba, estaba atrapada o agonizante, pero no se movía mucho y posó para mi cámara.

Yo la llevo

La raposa, me calzó con un jueguito que bien sirve para poner al menos algo en este blog que lo tengo tirado hace un tiempo.

Las reglas del juego son las siguientes:

Eins - Agarrar el libro más cercano.
Zwei - Abrir en la página 123.
Drei - Buscar la quinta oración.
Vier - Postear las siguientes tres oraciones, junto a las instrucciones.


Ella advierte que está prohibido sacar el ibro más cool, pero como estoy en la cama, todos mis libros están igual de cercanos asi que elegí de entre la repisa más cercana el más cool: El Quijote.

Y dice: "Vase desde allí a su aposento, échase sobre su lecho, no puede dormir del dolor de la partida, madruga muy de mañana, vase a despedir del rey y de la reina y de la infanta; dícenle, habiéndose despedido de los dos, que la señora infanta está mal dispuesta y que no puede recebir visita; piensa el caballero que es de pena de su partida, traspásasele el corazón, y falta poco de no dar indicio manifiesto de su pena. Está la doncella medianera delante, halo de notar todo, váselo a decir a su señora, la cual la recibe con lágrimas y le dice que una de las mayores penas que tiene es no saber quién sea su caballero, y si es de linaje de reyes o no; asegúrala la doncella que no puede caber tanta cortesía, gentileza y valentía como la de su caballero sino en subjeto real y grave; consuélase con esto la cuitada; procura consolarse, por no dar mal indicio de sí a sus padres, y, a cabo de dos días, sale en público. Ya se es ido el caballero: pelea en la guerra, vence al enemigo del rey, gana muchas ciudades, triunfa de muchas batallas, vuelve a la corte, ve a su señora por donde suele, conciértase que la pida a su padre por mujer en pago de sus servicios. "

La cita es larga y corresponde a los devaneos del Hidalgo sobre cómo eran los romances de los caballeros andantes y las doncellas, existentes sólo en su cabeza.

Como muchos amores, sólo imaginarios.

No tengo a quién pasársela. Si alguien lee esto, siga con el jueguito en los comentarios.