lunes, diciembre 15, 2008



Este es probablemente el mejor lomo italiano que me he comido en toda la vida. Casi lloro. Simplemente perfecto en todos los ítems. Salvo, que se acaba.

Vayan a la Fuente Mardoqueo en el barrio Yungay.

¿Ética o estética?



Creo que es innecesario explicar cómo esta foto habla desde y a la vez hacia el ser profundo del ser humano, ónticamente hablando.

El color azul, que quiere significar la caracter regio del can, nos dice que todos somos reyes, como un perro con su propia cola. La paradoja del perro/rey(azul) es un recurso humorístico del autor. Las connotaciones sexuales de aquél apéndice tampoco necesitan ser explicitadas, pero cabe hacer notar el carácter enhiesto de él.

Ahora, cabe hacer notar que la luz, que lo inunda (azul del agua) todo, es un detalle que impide contemplar la imagen por largo tiempo. Daña los ojos. Por eso, la fotografía congela este momento y permite hacer la observación que el modelo real impide. Meta-sico-fotografía en su mejor expresión.