Creo que la era de gloria del Big Pan ya pasó, pero yo sigo siendo un adicto. Ayer probé por última vez su especialidad: el
Big Pan, y fue D-E-L-I-C-I-O-S-O. (
No soy el único)

Big Pan: churrasco (o lomito) + queso + tomate + palta + mayo = un pedazo del cielo.
Debo reconocer que el churrasco no es de lo mejor, pero pasa. El pan es amasado, la mayonesa es casera y no he tenido problemas, el queso es razonable, los tomates son frescos y la palta tiene un poco de ajo (lo que permite sentir su sabor tooodo el día).
A propósito, el Big Pan no anuncia entre sus platos el Big Pan, sólo los conocedores lo piden y reciben el premio.
Lo mejor, su módico precio, $1.450.
Como recomendación, debe pedirlo para llevar porque el local es estrecho, y recuerde sacar muchas servilletas. Yo tengo bigote y no es gracioso andar con la mayonesa colgando.
No les recomiendo sacar los cubiertos que ofrecen en el local porque son de plásticos y no sirven para nada.
¿Cómo lo prefiero yo? Comerlo con mis propias manos en el cerro San Cristóbal.
Reparten a domicilio en el Barrio Bellavista.
BREAKING NEWS: ¡Tienen local en Suecia!